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  Con esta obra propongo una nueva reflexión sobre los distintos espacios en los que la obra artística contemporánea se inscribe; además de presentar un nuevo interrogante acerca de lo que las ciudades, como gran escenario del mundo, suscitan y comprenden. Hablo en esta obra de los límites, de las frágiles fronteras que separan lo “público“ y “lo privado“, del adentro y el afuera, de los imprecisos límites que pueden trazarse sobre la superficie de una postal que viaja entre un punto y otro del mundo, de los múltiples senderos que se “abren“, a través de una red poderosa y a la vez invisible como es la Web, que permite estar aquí  cuando en verdad se está en otra parte, de todo aquello que ocurre y acontece en el espacio urbano.

  Quién acecha nuestro paso mientras caminamos?, quién nos mira mientras nos perdemos por las calles de nuestra ciudad ?, quién es ese otro que cruza su mirada con la nuestra ? Quién está, ahora, en este instante, leyéndo estas palabras “del otro lado“ de la pantalla ?

  Y también: ¿ Dónde se inscribe la memoria de las ciudades ? Dónde queda inscripta la mirada de sus habitantes, de sus viajeros, de sus invasores,  de sus expulsados?. Hablo de las miradas. De todas las clases de miradas. También de las bestiales, aquellas que pueblan las calles de todas las ciudades del mundo, miradas cuyas pupilas, cuando se fijan en las mías, hacen vacilar la fragilidad de mis certezas y mis seguridades.

  Invito a quienes lo deseen a que incorporen en este sitio, sus ojos, su mirada, para que a través de ella otro límite, otro territorio, se manifieste, haciendo confluir de ese modo y en un mismo espacio (el de la Web),  las múltiples y diversas fronteras que conforman nuestra contemporaneidad. 

  Durante cuatro meses la ficción de la obra conformará la realidad cotidiana.  De manera conjunta con este sitio, y  la instalación montada en el Fondaco dei Tedescchi – Correo Central de Venecia-, se llevará adelante una acción postal y una interferencia urbana en las calles y las paredes de la ciudad de Venecia.

  Este sector del sitio estará habilitado solo por el período que dure la Biennal.

Graciela Sacco